A pocos minutos de Lisboa, se encuentra Sintra, villa declarada patrimonio de la humanidad en 1995.
A nosotros nos encanta, y hemos ido cerca de cinco veces. Así que las fotos que acompañan este post, como podrán ver, son de varias visitas, en varias estaciones del año.
Qué ver en Sintra
Con un espíritu muy romántico y una naturaleza verde y densa, Sintra enamora a todos lo que la visitan.
Tiene edificios preciosos, inspiración mora y romántica, casas de verano de familias acomodadas desde hace décadas.
Hay muchos trillos realmente mágicos por la montaña, y si estás en buenas condiciones físicas, puedes incluso pasear entre algunos de sus monumentos más importantes atravesando la montaña.
Castelo dos Mouros
El Castillo de los Moros, en Sintra, tiene una vista increíble sobre la ciudad y el mar.
Fue construido por los moros durante la invasión a la península ibérica en el siglo VIII y luego reconstruido por los cristianos.
Las murallas, que son visibles desde abajo, en el centro de la villa, serpentean por las colinas, y es posible recorrerlas, pero no lo recomendamos si llevas cochechito de bebé o si tienes rodillas débiles 😉
Palacio da Pena
El palacio, en plena sierra de Sintra, está rodeado por un parque nacional que lleva el mismo nombre y que se extiende por 200 hectáreas. Hay más de 500 tipos de árboles de todo el planeta, grutas, puentes, y lugares donde sentarse a descansar y disfrutar el paisaje. Recomendamos tomarse tiempo para pasear por la zona. (Para los bebés, mejor mochila, el cochecito sería una pesadilla)
En los jardines del palacio se encuentra el Chalet da Condessa, con un estilo muy de los alpes, y mandado a construir por D. Fernando II para ser casa de veraneo de su segunda esposa.
Dentro del palacio, puedes visitar los aposentos del rey y la reina, cocina, capilla y otros espacios.
Quinta Da Regaleira
Esta casa particular fue construida entre 1904 e 1910, primero, hogar de la Viscondessa da Regaleira y luego adquiridos por el Dr. António Augusto Carvalho Monteiro, un millonario aficionado a la ciencia y muy culto, que se dedicó a hacer de esta casa y sus jardines un lugar muy interesante.
Las esculturas, grutas, lagos y construcciones particulares de este lugar, guardan simbolismos alquímicos, como los que guardan la masonería y los templarios.
La visita guiada es imprescindible aquí para entender y apreciar tantos detalles, lo recomendamos.
Parque da Liberdade
Cuando sales de la estación de trenes de Sintra, caminas en dirección al centro, y una de las primeras cosas que encuentras es este pequeño y bonito parque: Parque da Liberdade, Sintra.
Está adornado con una especie de animales de papel maché gigantes, que a los niños les encantan.
Hay como en el resto de Sintra, una vegetación hermosa y abundante. Tiene pequeños senderos rodeados de árboles muy antiguos, pequeñas caídas de agua y bonitas vistas.
Puedes usarlo para subir un poco más hacia el centro, cambiando la carretera por naturaleza.
Centro de Sintra
Recorran el centro de Sintra, con calma, porque sus calles suben, bajan y se pierden en laberintos con vistas preciosas.
Hay muchos cafés y restaurantes, aunque también hay una zona de picnics, o de “merendas” como le llaman los portugueses, donde puedes acomodarte en una abundante sombra a orillas de la calle principal de la villa.
Justo arriba, hay un parquecito o playground que siempre visitamos.
Piriquita
Piriquita en Sintra es una panadería que vende unos pasteles famosos: Queijada.
Son unos pastelitos en forma de rectángulo, hechos con hojaldre y rellenos con una crema de huevos y almendras.
Por lo popular, suele tener filas, pero avanza rápido.
Está en la calle Rua Padarias 1/7, pero si preguntas por Piriquita, todo el mundo sabe dónde está y te indicará cómo llegar.
Cómo llegar a Sintra desde Lisboa
Fácil. Toma el tren en la estación de Rossio, el billete ida y vuelta ronda los 5€.
Otra opción es tomar esta visita guiada por Sintra y Cascais, que complementa muy bien cualquier visita a Lisboa.