Aprovechando los días calentitos que tuvimos durante la primavera y que aun no llegaban las fechas de temporada alta con sus ríos de gente, nos fuimos un fin de semana al Alentejo portugués, a Évora.
Escogimos Évora porque es un lugar tranquilo y cerca de Lisboa, y un camping de la cadena Orbitur porque tenemos buenas experiencias con ellos. Así quedó definido el destino: Camping de Évora.
Ya varias veces habíamos acampado, un par de ellas juntos, pero esta era la primera con nuestra pequeñita, así que quisimos irnos por la opción más cómoda para comenzar: bungalows.

Évora
Évora es una ciudad portuguesa ubicada en la región del Alentejo, conocida como la “Ciudad Museo” por su centro histórico (Patrimonio Histórico de la Humanidad) lleno de importantes monumentos muy bien conservados, como el Templo Romano de Évora la Capilla de los Huesos y el Palacio de Don Manuel.
En esta parte de la ciudad conseguirán también una plaza central llamada Plaza del Giraldo con tiendas, cafés y restaurantes con terraza.

El Jardín Público de Évora
Uno de los lugares que más disfrutamos en Évora fue el Jardín Público, un parque muy verde y agradable con hermosos pavos reales caminando entre las flores, laguna con patos, cafés, unas ruinas “fingidas” hechas con restos de varios monumentos civiles y religiosos de la ciudad y lo mejor de todo: un gran parque infaltil en la zona inferior.
Nuestra idea era visitar el centro medio día y pasar todo el resto del fin de semana disfrutando de la tranquilidad del camping.
De Lisboa a Évora
Hicimos nuestro pequeño equipaje, llevamos el carrito de bebé más liviano, mucha protección para el sol y nos dirigimos hasta la estación de metro y trenes de Siete Ríos en Lisboa, donde existe también un terminal de autobuses que salen hacia todo el país, llamados Rede Expressos.
Son bastante cómodos, aunque el precio no varia mucho del que se paga en los trenes.
Una hora y media de camino con paisajes lindos de primavera alentejana y llegamos hasta nuestro destino. Del terminal de autobuses de Évora decidimos pagar un taxi hasta el camping (4.70€) la distancia no es mucha, pero con 35 grados y al mediodía puede que no tengan ganas de empujar un carrito de bebé.

Camping Évora Orbitur
El camping orbitur en Évora no es muy verde, al igual que el resto de Évora, y tal vez le haga falta un poco de cariño a las áreas públicas, pero los bungalows donde nos quedamos están impecables.
Tienen aire acondicionado, baño con ducha, Tv, agua caliente, ropa de cama, toallas y cocina equipada con utensilios (sin horno o microondas). Hasta guías de la zona y del resto de Portugal consigues en su interior.
Hay varios tamaños de cabaña o bungalow, el nuestro era de dos habitaciones, con lugar para 7 personas si incluyen el sofá cama ubicado en el comedor, pero hay incluso para dos personas y sin cocina o baño.
Incluye además una pequeña zona externa con mesa y sillas plásticas para comer fuera o sentarse por la tarde a conversar. Me encantó.
Si lo necesitan, tienen disponible en alquiler sillas de comer para bebé (tronas) y bañeritas. Nosotros hicimos uso de un gran recipiente plástico que estaba dentro de los utensilios que incluye el alojamiento, y le dimos un baño al aire libre divertidísimos a la Mími Viajera.

El camping de Évora también tiene dos piscinas exteriores, una de adultos y una pequeña para los niños, y un parque infantil un poco viejo pero en buenas condiciones.
Los baños que se encuentran disponibles para quienes se quedan en caravanas o en tiendas, definitivamente podrían estar mucho mejor. Entré solo para saber en qué condiciones estaban y me sentí muy afortunada de no tener que usarlos, aunque uno de los bloques estaba cerrado, no sé si era para remodelarlo. Los de los bungalows están perfectos.
Cerca del camping hay un supermercado, se puede llegar caminando, aunque si van con carrito de bebé es bastante incómodo, ya que la entrada más cercana es una abertura improvisada del lado de la carretera. Igual estuvimos un par de veces y nos las apañamos. En la recepción del camping pueden comprar cosas muy básicas para cocinar y bebidas.
Desde aquí el centro queda a una buena caminata de 15 o 20 minutos, la cual no recomiendo en los momentos más soleados del día si van con niños.
No olviden el protector solar, ropa fresca y zapatos cómodos cuando visiten Évora.
Llegó el domingo y se nos acabó el paseo, fue nuestra primera acampada como familia y lo pasamos muy bien.